Gracias pero de nada Sr. Ridge
- Pilar Marrero / pilar.marrero@laopinion.com |
- 2009-08-25
- | La Opinión
Cuando un político dice que se retira para pasar más tiempo con su familia,
casi siempre hay gato encerrado.
Eso fue lo que dijo Tom Ridge el primer Secretario de Seguridad Nacional de
Bush, cuando renunció tres semanas después de las elecciones presidenciales de
2004.
Resulta ser que Ridge, quien ya ha tenido bastante tiempo de estar con su
familia y debe estar harto de ella, ahora está haciendo un tour para promover un
libro sobre su experiencia en el gobierno de Bush.
Así que, para vender el librito, ahora nos cuenta cual es la verdadera razón
por la cual entonces renunció con aquellos ataques familieros.
Dice Ridge que su ex jefe Bush y gente de su gobierno lo presionaron para que
cambiara el nivel de alerta a uno mayor antes de las elecciones de 2004.
Es decir, que de amarillo le pidieron pasar a naranja. Ridge se puso verde y
dijo que no. Pero no se lo contó a nadie.
Cuando recientemente escuché esto por la tele sólo pensé una cosa: ¡No me
digas, amigo Ridge! ¡Estoy en shock!
Los vaivenes de aquellos colorcitos: amarillo, naranja y rojo siempre
parecían sospechosamente ilógicos y arbitrarios y cada vez que aumentaban,
sumían al país en el terror mismo (irónico, que para protegernos haya que
aterrorizarnos….) sin que ello necesariamente hiciera más efectiva la acción
gubernamental, que no tenía por qué depender de un color.
Resulta que unos días antes de las elecciones del 2004, que estaba más
disputada de lo que ahora recordamos (¿se acuerdan que John Kerry era el
candidato demócrata o casi también se les olvida?), se discutió elevar a naranja
el nivel de amenaza debido a la distribución de un video de Osama Bin Laden.
Ridge afirma en su libro que él se resistió y al final la alarma no se elevó,
pero renunció pocas semanas después, "para estar más con su familia".
Lo malo de este tipo de confesiones a estas alturas no es que dudemos de
ellas –yo siempre pensé que confiar en un gobierno que comenzó una guerra ilegal
e innecesaria, entre otras lindezas, era una mala idea- sino porque ya para qué,
señor Ridge.
Ya para qué anda por ahí diciendo lo que pasó, si no es para vender su libro.
No es el único ni será el último que vende a sus ex jefes a cambio de un
contrato editorial: es sólo el caso más reciente.
Debió de haberlo dicho entonces, apenas ocurrió. Renunciar con una rueda de
prensa que pasara a la historia, donde usted nos contara los pelos y señales de
cómo se manejaba la famosa "guerra contra el terror", y de cómo fue que
terminamos por irnos a Irak cuando el señor Bin Laden se escondía en Afganistán
y luego en Pakistán.
Por qué no nos contó lo que hacían con Pakistán, país al que dábamos miles de
millones para ayudarlos en su lucha contra los terroristas y que, en vez de usar
el dinero para ello, lo usaban en armas para defenderse de la India,
supuestamente, o se lo robaban políticos corruptos.
Pero usted prefirió callar y buscar editoriales que le pagaran por su librito
para sacar todo a la luz mucho después.
No es por nada, pero gracias por su patriótico servicio. Creo que sin duda,
como noticias de impacto lo hubiera tenido aún más si usted hubiera renunciado
entonces. ¿Se imaginan el shock de un ministro de gabinete renunciando y
acusando al Presidente y otros ministros de manipular y aterrorizar al pueblo
con fines políticos?
Pero claro, así no se venden libros.
Comentarios a pilar.marrero@laopinion.comhttp://blogs.impre.com/politiqueando/
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